Bulgaria y Rumania entran de lleno en el espacio Schengen de libre circulación europea
Los países de la Unión Europea acordaron este jueves la adhesión plena de Bulgaria y Rumania al denominado espacio Schengen, el área de libre circulación de personas, después de trece años de espera.
"Es un momento histórico para dar al fin la bienvenida a Bulgaria y Rumania como miembros plenos de Schengen", expresó en la nota Sandor Pinter, ministro de Interior de Hungría, país que ejerce la presidencia semestral rotativa de la UE.
De acuerdo con Sandor, "este paso beneficiará no sólo a los ciudadanos búlgaros y rumanos, sino a la UE en su conjunto".
Los dos países del este de Europa ingresaron en la UE en 2007, pero solo en marzo de este año se integraron parcialmente al espacio Schengen, con la apertura de viajes aéreos y marítimos sin controles fronterizos.
Con esta incorporación, esta zona de libre circulación cubrirá 29 países: 25 de los 27 de la UE (quedan fuera Irlanda y Chipre), más Islandia, Liechtenstein, Noruega y Suiza.
La adhesión plena de Bulgaria y Rumania estaba bloqueada por Austria que, por motivos migratorios, había exigido mantener los controles fronterizos en las rutas terrestres.
Sin embargo, Viena anunció el lunes que no usaría su veto en la reunión de ministros de la UE de este jueves, allanando el camino al pleno ingreso de estas dos naciones el 1 de enero de 2025.
"Esta es una decisión histórica que marca el fin del proceso de acceso de los dos países a la zona de libre movimiento de la UE, un objetivo clave tanto para Bulgaria como para Rumania desde su ingreso a la Unión Europea", declararon ambos Estados en un comunicado conjunto.
- Acuerdo con Austria -
Bucarest y Sofía cumplían los criterios técnicos fijados por Bruselas desde 2010, pero llevaban más de una década esperando por el bloqueo de varios Estados miembros.
El último escollo era Austria, que se quejaba del número de migrantes indocumentados llegados a su territorio por la débil protección de las fronteras exteriores del espacio Schengen.
Finalmente retiró el veto tras un acuerdo con ambos países firmado en Budapest, que prevé el despliegue conjunto de guardias fronterizos entre Turquía y Bulgaria, y controles temporales en las rutas terrestres durante un período inicial de seis meses.
En un comunicado, el Consejo Europeo destacó que desde el momento en que se sumaron a la UE los dos países ya habían aplicado partes del marco jurídico del espacio de libre circulación.
Entre esas medidas, la nota destacó los controles en sus fronteras externas, la cooperación policial y la utilización de un sistema centralizado de informaciones.
Creado en 1985, el espacio Schengen es la mayor zona del mundo sin controles fronterizos, por el que más de 400 millones de personas pueden moverse libremente.
F.Green--MC-UK