El Parlamento Europeo decide sobre la reforma de las reglas presupuestarias
La plenaria del Parlamento Europeo debe aprobar este martes la reforma de las reglas presupuestarias de la UE, en busca de garantizar la recuperación de las finanzas públicas y preservar las inversiones.
El proyecto pretende modernizar el Pacto de Estabilidad y Crecimiento, adoptado en 1990 y que limita el déficit de las administraciones nacionales al 3% de cada PIB y la deuda al 60%.
Este marco, considerado demasiado drástico, nunca fue plenamente respetado, y ahora prácticamente todas las partes en discusión coinciden en que quedó obsoleto.
El texto, negociado intensamente durante dos años, tiene el apoyo de los tres principales bloques políticos: los Socialdemócratas, los liberales de Renovar Europa y los conservadores del Partido Popular Europeo (PPE).
El bloque de la izquierda mantiene una posición claramente crítica al proyecto, que considera una herramienta para reinstalar la política de austeridad en Europa.
Una parte del bloque de los Verdes también expresó dudas sobre la iniciativa.
El Pacto de Estabilidad y Crecimiento fue suspendido desde 2020 hasta 2023, primero para permitir inversión pública durante la pandemia de coronavirus y luego para ayudar a la recuperación de los efectos de la guerra de Rusia contra Ucrania.
Prácticamente todas las partes en discusión coincidieron en que no será posible al bloque retornar a un cuadro de rígida austeridad como la anterior a 2020.
El nuevo texto mantiene esos ratios sobre cada PIB aunque flexibiliza el ajuste exigido a los países en casos de déficit excesivo, si aceptan inversiones y adoptan reformas estructurales.
Así, contempla la posibilidad de que los Estados presenten trayectorias de 4 o 7 años para garantizar la sostenibilidad de su deuda.
En términos concretos, esto significa que los países con mayor volumen de gasto podrán disponer de un plazo mayor para retornar a la austeridad.
El influyente legislador ecologista belga Philippe Lamberts dijo que las nuevas normas "representan un suicidio económico, ecológico, geopolítico y democrático".
Sin embargo, el diputado conservador Markur Ferber las definió como "un nuevo comienzo y un retorno a la responsabilidad fiscal".
El paquete original, dijo, tiene "demasiadas fragilidades y fisuras" y carece de formas de revisar su aplicación real.
Con todas sus dificultades, el documento sometido a votación es el resultado de un delicado equilibrio entre los países endeudados del sur de Europa, como Francia, y los países llamados 'frugales' del norte de Europa, que exigen más rigor.
Las nuevas reglas, ya con la reforma del Pacto, serán utilizadas para la definición de los presupuestos de los países del bloque en 2025.
M.Carter--MC-UK