Con una épica remontada, Boston se adelanta 1-0 a los Warriors en las Finales de NBA
Los Boston Celtics vencieron este jueves 120-108 en la cancha de los Golden State Warriors en el primer partido de las Finales de la NBA gracias a una asombrosa remontada en el último cuarto liderada por el dominicano Al Horford.
De la mano de un estelar Stephen Curry (34 puntos), los Warriors tenían una ventaja de 12 puntos al iniciar el último cuarto cuando entraron en colapso y permitieron que los Celtics les arrollaran con una racha de 17-0 ante el atónito público del Chase Center de San Francisco (California).
La víspera de su 36 cumpleaños, Al Horford se estrenó en unas Finales con 26 puntos y 6 triples que compensaron una noche discreta de la figura de Boston, Jayson Tatum, que se quedó en 12 puntos (3/17 en tiros de campo) y 13 asistencias.
"Ha sido muy divertido", dijo Horford, que anotó 9 de 12 tiros de campo y sumó también 6 rebotes, 3 asistencias y un robo. "No ha sido nuestro mejor partido, pero hemos seguido luchando y encontrando diferentes maneras de conseguir esta victoria".
Ningún equipo en la historia había ganado un partido de las Finales por más de 10 puntos después de entrar al último cuarto con una desventaja de dos dígitos.
La remontada culminó un trepidante inicio de la pelea por el anillo entre los dos mejores equipos de los playoffs, que se combinaron para un total de 40 triples, récord para un partido de las Finales.
El escolta Jaylen Brown, con 10 de sus 24 puntos en el inicio del último cuarto, y el base suplente Derrick White, con 21 puntos y 5 triples, brillaron también para los Celtics, que nunca se rindieron pese a estar en desventaja gran parte del partido.
Dirigidos por el técnico novato Ime Udoka, los Celtics compiten por su primer anillo desde 2008 y ninguno de sus jugadores había jugado un solo partido de las Finales.
Los Warriors, en cambio, tienen la experiencia de pelear por sexta vez por el título en los últimos ocho años con el mismo núcleo formado por Curry, Klay Thompson (15 puntos) y Draymond Green (4 puntos y 11 rebotes).
"Jugaron un último cuarto tremendo, hay que reconocérselo. Es tan simple como eso", concedió el entrenador de Golden State, Steve Kerr.
Curtidos en mil batallas, los líderes de los Warriors llamaron a pasar página de esta derrota, la primera en 10 partidos jugados en casa en estos playoffs, y responder con fuerza en el segundo capítulo del domingo.
"Esto no es lo ideal pero creo en quiénes somos y en cómo afrontamos la adversidad", subrayó Curry. "Debemos ser honestos sobre lo que salió mal, responsabilizarnos mutuamente y salir con otro nivel de esfuerzo y desesperación para proteger nuestra cancha el domingo".
- Primer cuarto de récord -
Celebrando el regreso a las Finales tras dos temporadas de travesía en el desierto, Stephen Curry hizo disfrutar al Chase Center con un primer cuarto de récord.
A sus 34 años, el base explotó con seis triples, la mayor cantidad para un cuarto de un juego de Finales, para un total de 21 puntos en ese primer parcial.
Ni siquiera Marcus Smart, el Mejor Jugador Defensivo de la temporada, lograba frenar la exhibición de Curry, quien lideró a los Warriors a tres anillos (2015, 2017 y 2018) sin ser reconocido con un premio MVP (Jugador Más Valioso) de las Finales.
Resistiendo el bombardeo y la presión desde las grada, los Celtics comenzaron a ajustar su temible defensa y a dominar ambas pinturas, pasando de estar 10 puntos abajo a mediados del segundo cuarto a irse al descanso con ventaja en el marcador (56-54).
Pero a la vuelta del vestuario, los Warriors protagonizaron un tercer cuarto tan eléctrico como los de sus mejores tiempos.
Curry retomó su recital con triples y canastas de fantasía como una bandeja en la que elevó la pelota a la altura de la parte superior del tablero.
Mientras Steve Kerr sonreía en el banquillo local, Boston apretaba los dientes para no quedarse atrás después de estar 15 puntos abajo (72-87).
Con la celebración en marcha en el nuevo Chase Center llegó la inesperada debacle de los Warriors.
Jaylen Brown prendió la mecha con 10 puntos iniciales y Al Horford clavó devastadores triples consecutivos mientras del otro lado los Warriors perdían balones y fallaban hasta los tiros libres.
Aprovechando el cortocircuito de su rival, Boston firmó un devastador parcial de 40-16 en el último cuarto con el que se apoderaron del primer triunfo.
"El mensaje al comienzo del último cuarto fue: 'Ya hemos estado aquí antes. Sabemos lo que se necesita para superar un déficit como ese", explicó después Tatum. "Por mi parte espero no volver a tirar tan mal pero si eso significa que seguimos ganando, lo tomo".
D.Chapman--MC-UK